Arriates y saledizas

«A primera vista no estaba tan mal. Justo debajo de la ventana de Bruno había un jardín bastante grande y lleno de flores en pulcros y ordenados arriates. Parecían muy bien cuidados por alguien que hubiera comprendido que plantar flores en un sitio como aquél era una buena idea, como lo habría sido, durante una oscura noche de invierno, encender una velita en el rincón de un lúgubre castillo situado en medio de un brumoso páramo». (p. 24)

«En la pared del fondo había unas enormes ventanas saledizas que se proyectaban sobre el jardín y permitían colocar un cómodo asiento delante; y en el centro de todo aquello, sentado detrás de un enorme escritorio de roble, estaba Padre, que levantó la vista de sus papeles y esbozó una ancha sonrisa». (p. 33)

John Boyne, escritor irlandés, en El niño con el pijama de rayas 

arriate: Era (espacio) estrecha y dispuesta para tener plantas de adorno junto a las paredes de los jardines y patios.

saledizo, za:  Saliente o que sobresale.

FOTO: Portada de El niño con el pijama de rayas (2006). Barcelona, España: Salamandra. 

Autor: Susana Harringhton

Venezolana, profesora universitaria, amante de la literatura, orgullosa de sus raíces. Agradecida por los amigos que la vida y las letras le han regalado.