Nefelibata es el adjetivo para una persona soñadora, fuera de la realidad, y la palabra significa andar en las nubes. Hoy hablaremos de las nubes, descritas en el Diccionario como agregados visibles de minúsculas gotitas de agua, de cristales de hielo o de ambos, suspendidos en la atmósfera y producidos por la condensación de vapor de agua.
¿Quién puede sustraerse del encanto que provoca el ver las nubes en nuestro día a día? Ese paisaje cambiante, lleno de formas, no solo nos invita a soñar sino que nos entrega avisos del clima. La Organización Meteorológica Mundial, afiliada a las Naciones Unidas, identifica una decena de tipos de nubes, aunque aquí anotaremos solamente los vocablos incorporados oficialmente al español.
Así, tenemos cirros (nube blanca y ligera en forma de barbas de pluma), estratos (nube en forma de faja en el horizonte), cúmulos (nube con apariencia de montaña nevada con bordes brillantes), nimbos (nube grande, baja y grisácea, portadora de lluvia, nieve o granizo) y las combinaciones altostratos, altocúmulos, estratocúmulos y cumulonimbos.
Veamos las palabras más comunes que se relacionan con las nubes: anubado y nubado, nublo y nubla, nubarrón, nubazón y nublazón nos anuncian lluvia. El adjetivo nuboso es para un cielo cubierto de nubes o algo desgraciado o amenazador.
La nubosidad es el estado o condición de nuboso. Algo nebuloso significa que abunda en nieblas (nubes muy bajas) o que está oscurecido por las nubes y se refiere también a algo sombrío, falto de claridad o difícil de comprender. De niebla se desprenden neblina, neblinoso y neblinero, que en Chile y Cuba es un dispositivo luminoso apto para combatir la falta de visibilidad que produce la neblina.
También tenemos rumazón y arrumazón, el conjunto de nubes en el horizonte, y cerrazón para describir la gran oscuridad que precede a una tempestad, cuando el cielo se encapota (y se despeja o desencapota después de la tormenta).
En sentido poético, algo nubífero es que trae nubes y obnubilar es embelesar, aunque este verbo también se refiere a nublar o anublar la razón en el sentido de ofuscar o confundir, y hacer que la visión se vuelva turbia. Una tela anubarrada o nubarrada está coloreada en forma de nubes.
¿Ustedes también se dejan cautivar por las nubes? Aquí agregamos algunas fotografías de la autora y con gusto agregaremos las que nos envíen a 12palabrasenjuego@gmail.com. Agradecemos también sus comentarios.
Palabras en Juego les recomienda releer…
¡Gracias, Solange y Yezid! Es un honor contarlos entre nuestros lectores. Abrazos hasta Venezuela y Colombia.
Agradecemos también a Guille Dianda, de Argentina, sus aportaciones a este material con las palabras desusadas con ñ:
AÑUBLAR, ÑUBLAR (ambos no conjugan), ÑUBLOSO/A, ÑUBLO, ÑUBLADO.
Norma, que bello ese artículo.
Sí, definitivamente soy NEFELIBATA.
hermoso artículo.
Saludos