Hoy volvemos a tocar el tema de los gentilicios, el cual ya abordamos en Los orígenes de las gentes, pero en esta ocasión revisaremos algunos casos que cuentan con una segunda opción o alternativa quizás poco conocida, como es el caso de un guatemalteco, que también puede ser llamado guatemalense, o un jamaiquino que también es jamaicano.
A un alemán se le puede llamar germano o tudesco, y coloquialmente se le puede decir teutón. Estos términos tienen su raíz en los pueblos germánicos, que son originarios del norte de Europa.
A un italiano se le puede llamar coloquialmente tano, al francés también se le dice galo, un luso o lusitano es un portugués, y a un español también se le puede llamar hispano, pero este término también puede ampliarse para el que es de origen hispanoamericano. Si nos vamos mucho más al oriente nos podemos encontrar a un japonés, que también podemos llamar nipón.
Un guineano o guineo puede ser natural de Guinea, Guinea-Bisáu o Guinea Ecuatorial, ya que estos tres países africanos comparten el gentilicio. Sin embargo, si se quiere ser más específico se puede usar ecuatoguineano para los nativos de Guinea Ecuatorial, país africano que tiene el español como idioma oficial. Otras naciones africanas que comparten gentilicio son la República Democrática del Congo y la República del Congo, ya que los nativos de cualquiera de estos países son congoleños y/o congoleses. Algunos países con dobles gentilicios son Albania (albanés, albano), Angola (angoleño, angolano), Austria (austriaco, austríaco), Brasil (brasileño, brasilero), Dinamarca (danés, dinamarqués), Finlandia (finlandés, finés) y Nepal (nepalés, nepalí), entre otros.
Un bretón es natural de Bretaña, región de Francia, que no se debe confundir con el natural de Gran Bretaña, que es británico.
El gentilicio de los nacidos en México tiene doble grafía: mexicano y mejicano; estas dos formas son aceptadas para referirse a los aztecas. En Centroamérica están los ticos, que es como coloquialmente se conoce a los costarricenses.
Más sobre el tema en: Gentilicios
Un tema apasionante, Mikel. ¡Muchas gracias! En México es muy raro que alguien escriba «mejicano» y en Texas es más común ver escrito «tejano» -como en los Tejano Music Awards- que «texano», aunque atribuiría esta diferenciación a un sentido de orgullo y pertenencia gracias a la diferenciación del sonido de la equis y la jota, ya que suena más hispano decir «tejano».
En México, la equis de «mexicano» suena siempre a una jota, al igual que en Xalapa y Oaxaca. En algunos casos, la equis puede sonar a «sh», como en «mexica» y «xoloescuincle» (esta palabra no está en el Diccionario pero es muy conocida para nombrar al perro lampiño propio de esta tierra y ligado a la cultura «mexica»).