Según relata el Viejo Testamento, Goliat fue un gigante guerrero filisteo nacido en la ciudad de Gat y se supone, según las escrituras, que medía casi tres metros de estatura. Muchos conocemos su nombre por la expresión “David contra Goliat” y la usamos cuando queremos significar que alguna situación está en desequilibrio, cuando en algún enfrentamiento un rival es notoriamente más pequeño que el otro, o más débil, en fin, para representar desventaja.
Lo que pocos sabemos de este personaje, es que su existencia dio origen a la palabra goliardo, adjetivo que se utiliza para identificar a alguien dado a la gula y a la vida desordenada, o que es seguidor del vicio, los placeres y del demonio personificado en Goliat, no en vano la raíz etimológica de goliardo, que viene de la convergencia de nuestro gigante personaje y la palabra gula -garganta, en sentido de glotón-.
Ya en la segunda acepción, el Diccionario refiere que en la Edad Media se le llamaba goliardo al clérigo o estudiante vagabundo que llevaba una vida irregular y que solía componer poesías latinas de corte amoroso, satírico y báquico (perteneciente o relativo a Baco, dios del vino en la mitología clásica).
Y, yendo un poco más allá, de estos poetas se deriva otra palabra más exquisita aún: goliardesco, que se refiere a las poesías latinas del siglo XIII compuestas exclusivamente por los goliardos sobre temas inherentes a la vida que estos llevaban y a las críticas que hacían al mundo eclesiástico.
Etimológicamente hablando, goliardesco se forma con el sufijo –esco (relación, pertenencia), como en carnavalesco (relativo o parecido a un carnaval), burlesco (jocoso, festivo, relativo a la burla), picaresco (relativo a los pícaros), quijotesco (relativo o parecido al Quijote de la Mancha), y novelesco (relativo a la novela), etc.
Jejeje, que sabroso leerte comadre y amiga, éste idioma nuestro da para todo, si, recuerdo churrigeresco, gracias por tus interesantes aportes, besos a ti y a Alejandra, la bendición.
Saludos compadre.
Otras palabras que terminan en esco y que derivan de personajes reales o ficticios son: dantesco, cantinflesco, celestinesco, aristofanesco y churrigueresco (explicado en el artículo escrito por Rocco hace algún tiempo).
P.d. Alejandra vio el dibujo y se fue corriendo a buscar el libro de historias bíblicas para releer la de David y Goliat.